Dracoforja nace de una necesidad real: la de los propios jugadores.
Como roleros y amantes del wargame, siempre buscamos tener miniaturas, escenografía y elementos que den vida a nuestras partidas. Castillos, bosques, tabernas, dragones… todo lo que hace que una historia cobre forma en la mesa.

Primero creábamos para nosotros, pero pronto amigos y conocidos empezaron a pedirnos piezas. Así comenzó este proyecto: compartiendo la pasión. Decidimos formarnos, mejorar nuestras técnicas y profesionalizarnos, asistiendo a eventos y ofreciendo a otros lo que nosotros también necesitábamos: miniaturas y escenarios hechos con mimo y detalle, únicos y personalizados.

Porque cada pieza que sale de Dracoforja no es un producto en serie. Es una creación única, pensada para que cada partida sea una aventura distinta.